La cetrería, el Cid y otro ilustre burgalés

Poza de la Sal es una pequeña villa medieval al nordeste de la provincia de Burgos que destaca principalmente por su conjunto salinero, fundamental en la conservación de los alimentos en la Edad Media, y por ser el lugar de nacimiento del ilustre burgalés Félix Rodríguez de la Fuente hace 95 años.
Félix Rodríguez de la Fuente fue pionero en nuestro país en la defensa de la naturaleza y convirtió su afición por la naturaleza en una forma de entender la vida, sentimiento que transmitía allí donde iba, lo que le llevó a alcanzar un gran renombre como fenómeno y referente en la materia.
Una de sus grandes pasiones era la cetrería pero por aquella época se había perdido la práctica de la misma en nuestro país y él se encargó de recuperarla a través de los textos medievales.
Sus conocimientos en la materia le llevaron a publicar varios libros, participar en diferentes congresos, realizar entrevistas (fue portada en el diario ABC con su imagen bajo el título ‘El cetrero mayor del reino’), participar en numerosos programas de televisión, e incluso recibir encargos del mismísimo Gobierno. También le valieron para ejercer como asesor, en 1961, de la película El Cid, nominada a tres Oscars y rodada en España, donde compartió experiencia con Ramón Menéndez Pidal quien asesoraba al director en aspectos históricos.
Como homenaje a tan ilustre figura burgalesa hemos querido ahondar un poco más en este arte que tanta vinculación tiene con la ciudad de Burgos y el mundo cidiano.
¿Qué es la cetrería?
La cetrería es el arte tradicional y la práctica para mantener, adiestrar y volar aves de presa con el claro objetivo de obtener piezas en su estado silvestre.
Es a su vez un arte, por la interacción y constante comunicación existente con el ave así como por la interpretación del comportamiento del mismo, y un deporte ya que se trata de una modalidad de caza, con raíces medievales, que consiste en criar, domesticar y entrenar a un ave de presa para conseguir alimento.
En noviembre de 2010 fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO y, en la actualidad, personas de todas las edades la practican en más de 70 países alrededor del mundo donde es considerada un destacado símbolo cultural.
Hoy en día, y debido a su evolución, está orientada como una actividad social, cultural y recreativa que estrecha el vínculo del hombre con la naturaleza y prioriza la protección de las aves de presa, además de mantener sus vínculos tradicionales.
En la práctica de la cetrería existen dos modalidades principales:
Alto vuelo
Consiste en soltar el ave en un simple y extenso terreno, con visibilidad, donde debe elevarse representando unos círculos y aprovechando las corrientes térmicas ascendentes para alcanzar la altura óptima en la que pueda reconocer el terreno en busca de su presa. Una vez detectada esta, se sitúa en la vertical, se levanta y, plegando sus aladas, se deja caer en picado para envolverla.
Esta modalidad, también conocida como “altanería”, se introdujo en España en la primera mitad del siglo XII y suele estar representada por lo halcones.
Bajo vuelo
En la técnica del bajo vuelo o “brazo tornado”, el ave sale directamente del puño del cetrero para dar caza a su presa.
Esta modalidad está representada por el género accipiter, entre los que se encuentran gavilanes y azores, y por el género buteo, águila de Harris, águila colaroja, entre otras, aves con alas más amplias y redondas y una cola de mayor longitud que les permite una mejor maniobra para los ambientes de boscaje en los que se mueven.
Además, es necesario un material específico para el manejo de las aves por lo que el equipo de un cetrero, aparte del pájaro de presa, siempre cuenta con los siguientes elementos:
• Muñequeras (trozos de cuero que se acoplan a los talones de las aves para su comodidad) y pihuelas (tiras de cuero de pequeño tamaño para atar al ave a su posadero o para controlarlo cuando está en el guante).
• Caperuzas (capucha de cuero que se le coloca al ave para privarla de la visión).
• Tornillos (pieza metálica compuesta de dos anillos giratorios que une las pihuelas del ave a la lonja).
• Lonjas (cuerda con un botón en uno de sus extremos que sirve para asegurar al ave).
• Cascabeles, ubicados en cada talón (o también conocido como tarso) para tener localizada al ave.
• Equipo de telemetría (sistema de radio para la localización de la misma).
• Guante o lúa, cuya finalidad es la protección de las garras del ave, para ello, es necesario una composición de piel gruesa.
• Morral (bolso para portar los artilugios necesarios).
• Fiador (cuerda fina y dura que sirve para adiestrar al ave, en sus inicios para que no se pierda y, posteriormente, para que no se escape).
• Percha o banco son las posaderas donde descansa el ave y está compuesta de astroturf, un césped idóneo para la salud de sus patas.
• Señuelo o imitación de la presa.
La cetrería en España
España sustenta una enorme tradición cetrera y prácticamente se ejerce en todas las comunidades autónomas aunque no deja de tratarse de una actividad minoritaria. Cada comunidad cuenta con su propia legislación que regula su práctica y rige las obligaciones y prácticas del cetrero.
Cabe destacar que el pasado 1 de marzo, la Junta de Andalucía, en sesión de Consejo de Gobierno, declaró Bien de Interés Cultural en la tipología de Actividad de Interés Etnológico, la cetrería en esta comunidad, con la finalidad de garantizar la perdurabilidad en el tiempo de esta actividad ancestral.
La cetrería en tiempos pasados
Según diferentes expertos en la materia, salvo en los momentos más remotos de la historia y debido al costoso mantenimiento de dichas aves, el fin básico de la cetrería no fue la obtención de alimentos. Por el contrario, sí era considerada una actividad limitada a la nobleza y clases adineradas a la que no accedían estamentos inferiores.
Durante su apogeo en la Edad Media, las aves de cetrería formaban parte de los séquitos, estaban entre los principales obsequios y eran moneda de cambio en negociaciones y rescates pero también era la manera de sellar una compraventa, una donación o permuta.
Estas aves, a su vez, contaban con una gran protección y se consideraba un hecho inadmisible capturarlas antes de tiempo, matarlas o lisiarlas, siendo incluso perseguido por ley.
Con el desarrollo de las armas de fuego y el auge de otras modalidades de caza que se extendieron y popularizaron, la práctica de la cetrería decayó, sin embargo, gracias a múltiples y diversos escritos medievales y representaciones artísticas en vidrieras, tapices, pinturas, esculturas y obras de teatro, es posible recorrer la historia de este tradicional arte.
La cetrería en el Cantar de Mío Cid
Llama especialmente la atención la ausencia de referencias a este arte en el Cantar de Mío Cid. La única referencia existente a las aves de caza se encuentre en los versos 4-5:
“Vio puertas abiertas e uços in cañados, | alcándaras vazías, sin pielles e sin mantos, | e sin falcones e sin adtores mudados”
“Vio puertas abiertas y postigos sin candados, alcándaras vacías, sin pieles y sin mantos, y sin halcones y sin azores mudados.”
Según diferentes estudiosos nuestro héroe legendario las habría llevado consigo para proveerse de alimentos durante el destierro, idea reforzada por los primeros versos del romance donde se presentan al Cid llevando sus halcones y cazando mientras marcha al destierro, sin embargo, la ausencia de aves en el resto del Cantar respondería a tres razones:
En primer lugar, hacer hincapié en la privación del honor a la que fue sometido y su separación de los altos estamentos de la sociedad, además de remarcar la situación de guerra a la que hacía frente nuestro héroe legendario con la ausencia de situaciones de ocio. Finalmente, manifestar la lenta, pero eficaz, incorporación de prácticas y restricciones provenientes de la iglesia por parte del estamento nobiliario.
La cetrería y el Festival Cultural Burgos Cidiano
Los amantes de este arte pueden disfrutar durante la celebración del evento cidiano de numerosas exhibiciones de vuelo de aves rapaces, además de conocer y profundizar en sus hábitos, sus habilidades de caza, la relación que mantienen con los seres humanos y su importancia para el medio ambiente.

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